Griesser, sistemas de protección solar, participa en la primera casa activa de Italia

La primera casa activa de Italia está situada en Udine. Loris Clocchiati, propietario del Gruppo Polo, presente en varios países, se ha orientado a la construcción sostenible. Es por ello que no ha de extrañar que haya querido hacer de su vivienda su obra insignia. Su “Casa Zero” genera más energía de la que consume, estableciendo un circuito continuo. En ello, desempeña un papel decisivo el óptimo aprovechamiento de la luz del día. Y ahí entró en juego Griesser.

Bioarquitectura, ecología y sostenibilidad son las palabras que definen el edificio de la A a la Z.
Aplicando criterios estrictamente ecológicos Loris Clocchiati construye la casa activa que no solo se autoabastece de energía geotérmica o fotovoltaica sino que incluso genera un excedente de energía. En su construcción nada se deja al azar. Su emplazamiento se decide basándose en un estudio bioclimático. Los materiales empleados proceden de la región. Ni se transporta nada de lejos ni se tira nada, incluso se integra a la nueva obra piezas de un antiguo granero situado en la finca.

Loris Clocchiatti consigue conjugar perfectamente naturaleza, confort y seguridad sin renunciar por ello a la calidad de vida a causa de los principios ecológicos aplicados.
La casa activa se enclava perfectamente en la naturaleza aunque esta a su vez también determina la arquitectura de la casa. La zona de estar orientada al sur tiene mucha claridad y luz del sol, mientras que la zona de los dormitorios, que preferiblemente debe ser más fresca, está orientada al norte.

Por esta razón no podía faltar en la construcción de la casa activa un sistema de protección solar automático adecuado a las altas exigencias. Por un lado este sistema debía proporcionar a sus habitantes la luz natural suficiente y evitar en la medida de lo posible el uso de la luz artificial y por otro lado debía controlar el aumento, no poco frecuente en la cálida Italia, de la temperatura interior. Es en este punto en donde Griesser resulta ser la opción perfecta ahorrando a su propietario la instalación de un costoso sistema de climatización y garantizando la conjugación perfecta de naturaleza, confort y seguridad.

La persiana Metalunic de Griesser no solo cumple las exigencias requeridas en cuanto a protección solar sino que además incluye la seguridad, cumpliendo en el caso de la casa activa una gran labor. Las lamas de la persiana Metalunic llevan integrada la protección anti elevación y se ajustan de forma segura por medio del automatismo central.

Ecología y sostenibilidad son un tema esencial para Griesser que produce todas sus persianas respetando la protección del medio ambiente. Gracias a unas plantas de producción modernas, el líder del mercado suizo de sistemas automáticos de protección solar evita anualmente incontables toneladas de cromo hexavalente y aguas residuales de procesos. Además por cada uno de los sistemas de protección reciclado, Griesser dona una cantidad a la fundación MyClimate.