En el presente artículo, Mauri Saksala, Jefe de Ventas de SPARKLIKE, analiza diversos aspectos relativos a la fabricación de doble y triple acristalamiento y los diferentes métodos a seguir para obtener un control de calidad efectivo en el porcentaje ...
Mauri Saksala Jefe de Ventas de SPARKLIKE |
Los vidrios que se fabrican en la actualidad incorporan una gran cantidad de elementos con el fin de mejorar sus propiedades. Una de ellas es asegurar su eficiencia energética en los edificios, tanto en el caso de aprovechar la calefacción como la refrigeración. Esta eficiencia puede conseguirse con diferentes métodos, desde vidrios de capas hasta acristalamientos aislantes compuestos por dos o más vidrios con cámaras entre ellos, en las que puede haber aire, vacío o algún gas específico, generalmente argon o krypton.
Estos gases se aplican a la cámara interior bien durante el proceso de presión o bien manualmente. Uno de los objetivos es que la concentración inicial de gas sea la adecuada y que permanezca así en adelante. Existe la posibilidad de una fuga de gas durante el sellado de la Unidad de Vidrio Aislante, por lo que es necesario someterla a prueba antes de entregarla a su destinatario. En caso de superar esta prueba, las Unidad de Vidrio Aislante tendrá una larga vida útil, por lo que las empresas transformadoras necesitan un método que les permita un chequeo fiable de este tipo de acristalamientos.
El sistema permite asegurar un control de calidad del más alto nivel gracias a la medición precisa de cualquier tipo de gas. |
Aunque no existe un estándar absolutamente definido en todos los campos, la industria y las empresas transformadoras tienen una serie de buenas prácticas con el fin de fabricar vidrio aislante de alta calidad. Un hecho comprobado es que las pequeñas moléculas del gas tienden a fugarse, por lo que el gran reto es conseguir una concentración de gas por encima del 95% una vez sellado el acristalamiento.
La medición del gas argon puede hacerse de manera invasiva o no invasiva. El método invasivo significa penetrar a través del sellado y extraer una muestra que permite calcular la proporción de gas automáticamente. Es una tecnología fiable y asequible, pero afecta a la estructura del acristalamiento.
Una señal luminosa sobre el vidrio permite calcular automáticamente la cantidad de gas interior. |
Por el contrario, el método no invasivo de Sparklike se basa en la aplicación de una señal luminosa sobre la superficie del vidrio, de forma que basándonos en el color de la luz ionizada es posible calcular automáticamente el contenido y la cantidad de gas que hay en su interior. Se trata de una solución rápida y precisa que puede repetirse cuando sea necesario sin dañar el acristalamiento y con el único requisito de que al menos uno de los vidrios sea monolítico.
Los últimos avances en este sistema de medición incluyen el uso de tecnología láser que permite incluso una óptima medición a través de vidrios de capas y laminados.
Estas innovaciones permiten asegurar un control de la calidad del más alto nivel, acorde con las expectativas de este tipo de productos, permitiendo en la práctica una medición precisa de cualquier tipo de gas.
La nueva tecnología envía una señal láser modulada al interior del vidrio aislante de forma que los parámetros de reflexión, intensidad y variación armónica determinan la cantidad exacta de oxígeno en su interior, lo que permite deducir por eliminación el porcentaje de gas, por lo general argon y krypton.
Disponer de información precisa de la cantidad de gas de cada acristalamiento es la prueba de un control eficiente y online de la calidad de los vidrios y parte fundamental en la producción de las empresas transformadoras actuales.