En estos más de 15 años, Filtraglass se
ha convertido en un referente del mercado
abriendo sus fronteras y exportando nuestros
sistemas a diversos países en distintos
continentes.
Un equipo innovador, dinámico y a la
vanguardia tecnológica, además de un
servicio al cliente personalizado y cercano,
ha permitido a Filtraglass crecer y
desarrollarse creando máquinas cada vez
más adaptadas a las necesidades de sus
clientes.
a las empresas transformadoras:
principal de un sistema de reciclaje es la
reducción del consumo de agua mediante su
reutilización. El sistema recoge el agua con
partículas sólidas de vidrio utilizada en los
procesos de su manufactura y la filtra para
después devolverla al circuito cerrado de
suministro.
Por lo general, un sistema de reciclaje
puede llegar a reducir el porcentaje de consumo
de agua de la red en hasta un 85 %.
Sin embargo, esta cifra puede aumentar o
disminuir según las condiciones de la instalación,
del número de máquinas, de las
posibles fugas en el circuito y de las pérdidas
de agua por evaporación.
tras la instalación de un sistema
de reciclaje de agua, el mantenimiento de
las máquinas de tratamiento del vidrio se
ve reducido gracias al uso de agua limpia,
de calidad equiparable a la de la red y sin
residuos de polvo de vidrio que pueden dañarlas.
De este modo, más allá de reducir su
mantenimiento, también se evita el desgaste
de las máquinas y sus piezas y, en consecuencia,
se alarga su vida útil.
más importantes de cualquier empresa de
cualquier sector es su productividad. Ésta
puede verse afectada por diversos factores,
entre ellos, los paros en la línea de producción
para realizar tareas de mantenimiento.
Las plantas de tratamiento de vidrio que
instalan sistemas de filtración de agua reducen
sus tareas de mantenimiento, y en
consecuencia, los paros en la línea de producción.
El tiempo que antes se empleaba
para sustituir el agua de los tanques y extraer
el residuo, ahora se emplea para seguir produciendo.
el consumo de agua es uno de los factores
sobre los que en los últimos años se
ha incidido especialmente para contribuir
positivamente al mantenimiento del medio
ambiente. Actualmente, que una empresa
cuente con un valor ecológico puede ser un
rasgo distintivo respecto a su competencia.
Con la instalación de un sistema de filtración
de agua se contribuye a evitar la
degradación del medio ambiente de dos
formas distintas: por una parte, reduciendo
el consumo de agua al reciclar y reutilizar
siempre la misma; y, por la otra, evitando la
deposición de polvo de vidrio en el medio
ambiente, ya que el sistema convierte este
polvo de vidrio en un residuo sólido, seco,
extraíble y reciclable.
el consumo de líquido refrigerante va
estrechamente ligado al del consumo de
agua. Algunas empresas de la industria de
tratamiento del vidrio emplean este producto
para mejorar las tareas de corte y evitar el
calentamiento de las muelas diamantadas.
En una instalación sin sistema de reciclaje
de agua, el refrigerante debe sustituirse con
más regularidad ya que la vida útil del agua
al que se le aplica es más limitada.
El cambio principal que supone la instalación
de un sistema de filtración es la
regularidad en la que el agua debe reemplazarse,
que se reduce drásticamente. De este
modo, el consumo de refrigerante disminuye
ya que sólo debe añadirse por una fuga o por
el proceso ordinario de evaporación.
de calidad óptima, no solo influye en el nivel
de mantenimiento de las máquinas o en la
extensión de su vida útil sino que también
influye en el resultado final del vidrio tratado.
El uso de agua filtrada en los procesos
de tratamiento del vidrio permite obtener un
producto final limpio: un vidrio transparente
y libre de residuos de polvo de vidrio.