Glasser, Correlli Glass e Inova Glass son tres empresas mexicanas con una larga trayectoria en la industria vidriera. Además del origen y del extenso recorrido, dos cosas más tienen en común: el trabajo en equipo y la apuesta por la maquinaria inteligente de TUROMAS.
Jorge Guzmán, presidente de Glasser. |
GLASSER
Glasser, tal y como hoy es conocida, nació hace 30 años. Antes, le precedió Vitrocolor y, mucho antes, otras empresas. Porque el apellido Guzmán está presente en la industria del vidrio desde 1931. Jorge Guzmán, el actual presidente del grupo empresarial Glasser, representa la tercera generación del negocio familiar.
Tras haberse dedicado al vidrio fundido y al vidrio soplado, ahora, procesa vidrio plano y está especializado en vidrio para electrodomésticos. Desde sus tres plantas ubicadas en Ciudad de México, Querétaro y Santiago de Chile vende a Sudamérica y a Estados Unidos.
El objetivo principal del grupo mexicano es ofrecer un buen servicio al cliente. Un cliente que, cada vez, exige más calidad y más precisión en el producto, el templado, los colores, el acabado… Una exigencia que le ha llevado a automatizar procesos. Aquí, entra en escena la implantación de la tecnología avanzada de TUROMAS.
Glasser y TUROMAS coincidieron por primera vez en Düsseldorf (Alemania) en la 24 edición de Glasstec, la feria líder mundial de la industria del vidrio, que se celebró en el año 2016. Algo que llamó especialmente su atención fue la configuración y las prestaciones de la mesa de corte, unas características técnicas que no había encontrado en otras marcas europeas.
Además, “nos pareció una máquina práctica, pensada en las necesidades del cliente, no en las necesidades del fabricante de maquinaria y nos ha dado resultados muy buenos”, cuenta Jorge Guzmán.
La mesa de corte de vidrio monolítico que está instalada en la factoría de Querétaro se corresponde con el modelo RUBI 513VAC y trabaja en conexión con una mesa de tronzado MT 300. Esta mesa es capaz de alimentar tres líneas continuas de alta producción y ha posibilitado fabricar hasta un millón de piezas al mes.
Junto con el incremento de la producción, la máquina ha solucionado varios problemas que la compañía tenía con “la carga del vidrio en la mesa de corte, el posicionamiento a punto cero, la rapidez y la exactitud en el corte y la rapidez en el traslado de las hojas para poner la siguiente lámina de vidrio”, afirma Guzmán.
El crecimiento no sólo ha venido de la mano de nuevas tecnologías que ayudan a desarrollar mejor el trabajo, sino que el factor humano es y ha sido fundamental. “Nos gusta trabajar en equipo; nos gusta hacer equipos de trabajo creativos y colaborativos”, reconoce el presidente. “Glasser somos todos”, ese es su lema.
César Castellanos, presidente de Correlli Glass |
CORRELLI GLASS
En el año 1991 César Castellanos y Silvia Sánchez, marido y mujer, fundaron Correlli Glass. Por aquel entonces todos los procesos del vidrio eran manuales, dentro de unas jornadas laborales que sabían cuándo arrancaban, pero no cuándo terminaban.
El hecho de empezar el negocio desde cero y realizar el trabajo de forma manual provocó que se sorprendieran cuando conocieron las mesas de corte de TUROMAS por primera vez. La meticulosa fabricación y robustez de las máquinas les transmitió seguridad para cortar láminas de vidrio grandes.
El matrimonio de empresarios mexicano ha experimentado con otras marcas, pero desde que ha dado con TUROMAS les “ha encantado la forma en que se han adaptado a nuestras necesidades y no nosotros a sus líneas ya establecidas”, sostiene César Castellanos.
En comparación con otros fabricantes, también les impresionó la velocidad y la precisión en el corte de vidrio, asimismo reconocen que el sistema de carga TUROMAS para levantar y manipular las hojas de vidrio les ha ayudado a mejorar la calidad y eficiencia de sus procesos. La combinación en la que Correlli Glass confió fue la mesa para corte de vidrio monolítico RUBI 403VAC-6 ES y la mesa de tronzado MT 300.
Además, el trinomio eficiencia, calidad y precisión es fundamental de cara a los vidrios de capa, cuya instalación es tendencia arquitectónica actual en fachadas y ventanas, según cuenta el directivo.
Casi tres décadas de trayectoria dan para mucho y, hace diez años, se adentraron en el vidrio templado. Hoy, Correlli Glass cuenta con el mayor número de hornos de templado en Ciudad de México. La cantidad y la calidad les diferencia del resto porque dan servicio las 24 horas, de hecho, fueron pioneros en atender rápidamente al cliente a cualquier hora, del día o de la noche.
En el sector del mueble, la decoración, la automoción y la arquitectura, la empresa mexicana está muy bien posicionada. Entre algunos de sus clientes más importantes, figuran Saint-Gobain o los grupos hoteleros Posadas y Quinta Real. Todos los meses trabajan en el acristalamiento y la decoración de un hotel de la última cadena hotelera mencionada.
El metrobus de Pachuca, el Centro de Exposiciones de México y varios de los museos mexicanos más importantes son algunos de los proyectos más emblemáticos para Correlli Glass. De forma más o menos inminente, tienen nuevos e interesantes proyectos en Monterrey y “es importante contar con una marca sólida como TUROMAS, si queremos ser los mejores debemos estar con las mejores marcas”, mantiene César.
Aunque el secreto del triunfo de esta empresa tampoco sería posible sin las personas. “Me encanta trabajar en los valores con todo mi personal, creo que es la base del éxito de cualquier empresa de cualquier tipo”, reconoce Silvia Sánchez, quien, desde el humor y el cariño, llama “hijos” a los casi doscientos trabajadores que suman entre las plantas de Ciudad de México y Monterrey.
Gustavo Moreno, gerente de Inova Glass. |
INOVA GLASS
El origen de Inova Glass se remonta al año 2007. Se inició en la industria con un horno rústico, fabricado totalmente de forma manual. A lo largo de estos 12 años, ha crecido y cuenta con plantas repartidas por Chihuahua, Hermosillo, Torreón, Mazatlán y Aguascalientes.
Las plantas de Inova Glass en Hermosillo, Mazatlán y Aguascalientes tienen nombre propio: Termiglass, Cristal templado de Mazatlán y Magnoglass, respectivamente. Templado plano, templado curvo, laminado certificado, vidrio aislante y pintado (con pintura cerámica o pintura en frío) son los tipos de vidrio con los que trabaja.
El grupo Inova Glass ha ido evolucionando hacia la automatización y simplificación de los procesos y, en el transcurso de esa transformación gradual, dio con la solución inteligente de TUROMAS para automatizar el proceso industrial.
La inversión en automatización, aunque haya traído consigo mayor productividad y eficiencia, vino motivada por un trágico accidente laboral en la fábrica de Chihuahua. Un hecho que hizo poner la seguridad e integridad física del personal por encima de todo.
Gustavo Moreno, a la cabeza del conjunto de estas empresas mexicanas, se muestra muy satisfecho con la relación con TUROMAS. “Profesional y excelente” son los adjetivos que emplea para calificar el trabajo y la asistencia técnica de la marca española.
En 2014 compró su primer almacén inteligente, convirtiéndose en la primera compañía mexicana que contaba con un cargador automático capaz de gestionar completamente el almacén y el transporte de vidrio. Hoy en día, ya suman tres y está en conversaciones con la firma española para adquirir un cuarto.
Además del trío de almacenes inteligentes, ha apostado por tres mesas para el corte de vidrio monolítico y una para corte de vidrio laminado. “Las líneas de corte y el almacén inteligente que hemos adquirido son los de mayor avance tecnológico con decapados, aspiradores, etiquetadoras, motores lineales… y eso nos ha ayudado muchísimo”, afirma Gustavo Moreno.
“Estamos convencidos de que TUROMAS es de las mejores marcas, si no es la mejor, a nivel mundial en líneas de corte y almacenes inteligentes”, reflexiona un gerente siempre atento a los cambios del entorno, dispuesto a innovar, mejorar y prosperar.
La trayectoria de Glasser, Correlli Glass e Inova Glass en el sector vidriero es larga y exitosa. Años de logros que se han alcanzado gracias a lo material y a lo inmaterial; gracias a la pasión, tenacidad, compromiso y excelencia. Cuatro cualidades que tienen en común con TUROMAS.