La nueva tecnología láser LSR de HEGLA optimiza el corte del vidrio al acelerar procesos como el calentamiento y el propio corte, al tiempo que se mejora el acabado de los cantos evitando la posterior delaminación de los vidrios.
En todo el proceso de corte, el PROLAM LSR de HEGLA, equipado con tecnología láser, proporciona al menos un 20 % más de rendimiento.
“Cuanto más gruesa es la lámina y, por tanto el laminado total, más tiempo se ahorra”, explica el director general de HEGLA, Bernhard Hötger. “Podemos separar una lámina de diez capas en diez segundos y mantener la máxima calidad del borde de laminado gracias al uso cuidadoso del láser”, añade Hötger.
El dispositivo de calentamiento mediante diodos láser se sitúa por encima del vidrio y, por tanto, está protegido del polvo, el lucite, el aceite y las astillas de vidrio, por ejemplo. Mientras que el rendimiento de las lámparas de infrarrojos disminuye debido a la suciedad, el de los diodos láser se mantiene durante mucho tiempo. El aporte de calor localizado tiene también otra ventaja: el vidrio solo se calienta mínimamente para poder realizar cortes posteriores sin tiempo de enfriamiento.
En un grupo de líneas combinado con otro sistema de corte existente o nuevo, la producción puede aumentarse de forma significativa. “Combinando una distribución inteligente del corte, una tecnología láser respetuosa con el vidrio y un solo operario, se logra un rendimiento que satisface las más altas exigencias”, explica Bernhard Hötger.
En comparación con la tecnología de calentamiento convencional, la tecnología láser LSR reduce el consumo de energía. El diodo láser solo se enciende brevemente y, dependiendo de la longitud del corte, se activa de manera parcial o total.